Mi huerto urbano PARTE 1
Construir un huerto urbano propio, es la mejor forma de cultivar nuestros alimentos vegetales libres de fertilizantes y plaguicidas. Ya comenté en otra ocasión que mi casa disponía de un pequeño jardín de unos 20 metros cuadrados aproximadamente y que no le encontraba sentido el tener ese pequeño trozo de terreno plantado de césped, sin ningún aprovechamiento útil, el cual no me enseñaba nada ni tampoco podía hacer nada en él.
Las dimensiones del terreno son 4,4 x 4,4 metros. Estos son 19,36 m2. Se trata de un cuadrado orientado Sureste-Noroeste. Buena orientación.
Mi huerto urbano. ¡Manos a la obra!
paso 1
Lo primero que tuve que hacer fue arrancar un Ficus de considerables dimensiones. Estos árboles se caracterizan por tener gran cantidad de raíces y estas son bastante profundas. Resultó costoso.
A continuación, había que arrancar todo el césped, procurando que no quedaran raíces, para que no volviera a salir. El terreno estaba bastante duro ya que se ha estado pisando durante 20 años. Había que profundizar “cavando” unos 30-40 cm. para romper la capa dura de tierra.
Eliminado el césped y algún que otro arbusto que también había en la parcela, se procedió a nivelar el terreno, retirando tierra de unas partes y depositandola en otras.
La altura del “bancal” (*) se rebajó en unos centímetros por debajo de las aceras que rodeaban el mismo, con el objeto de que, al llover o regar, el agua no saliera de la tierra hacia la acera.
paso 2
El bancal siempre debe estar mas bajo que el terreno que le rodea.
Durante este proceso de nivelación se incorporaron unos 10 sacos de 25 kg. de arena fina, la que venden en almacenes de construcción, es muy barata, el objeto era suavizar la tierra, también se incorporaron varios sacos de substrato y otros varios de estiércol muy hecho, procurando que estos quedaran bastante superficiales.
Ya teníamos el terreno labrado, nivelado y abonado, (todas estas operaciones se realizaron en el mes de Febrero), ahora procedía diseñar el huerto urbano, asunto bastante delicado y muy importante, porque de su diseño va a depender como funcione durante toda la temporada, ya que es muy difícil introducir modificaciones cuando las “tablas”(**) están plantadas, aunque en mi caso y pese a la dificultad, he tenido que hacer modificaciones sobre la marcha de los cultivos, como ya veremos más adelante.
Partimos de la idea fundamental de que en un huerto necesitamos tener bien definidos los bancales para plantar y los pasillos para poder circular por el huerto sin tener que pisar los terrenos de cultivo. Esto es fundamental: no pisar las tablas, para que no se apelmace la tierra, esta debe estar, siempre, esponjosa y bien aireada, sobre todo para que raíces, agua y nutrientes “circulen” por ella sin dificultad.
Otras dos ideas fundamentales son aprovechar el terreno y dimensionar las tablas de la forma mas óptima a las necesidades de los diferentes cultivos que se van a desarrollar en ellas.
paso 3
Optamos por 4 bancales de 80 cm. de ancho y de largo toda la parcela ( 4,4 metros), orientados Sureste-Noroeste, con pasillos entre bancales de 40 cm. de ancho y de la misma longitud que los bancales.Por entre cada dos bancales un pasillo, esto nos suponen 3 pasillos. La separación entre bancal y pasillo la realizamos con tablas de madera de 4x12x120 cm. Poniéndolas de canto. Para sujetarlas mejor al terreno les clavamos unos clavos de 15 cm. de largo por cada metro de tablón, realizamos una pequeña zanja en la que clavamos los tablones, colocando previamente un poco de masa de mortero, (cemento + arena + agua), donde se van a introducir los clavos en la tierra, con el fin de que el tablón, que ha sido colocado de canto, tenga mejor sujeción. Usando nivel y martillo de goma se clavan las tablas, perfectamente niveladas, unos 7 cm.
quedando por tanto 5 cm. sobresaliendo del terreno, presionamos la tierra firmemente contra los laterales de los tablones y cuando se ha secado el mortero, estos quedan firmemente sujetos.
Los pasillos se han cubierto de arena fina, nivelándola muy bien, y sobre la arena se han colocado unas placas de tablillas 40×40 cm. que nos permite andar por los pasillos de forma cómoda, y aunque haya llovido, el pasillo se encuentra seco.